domingo, 18 de noviembre de 2012

Verbos en el Ebro



VERBOS EN EL EBRO
Pasear desprendía aromas de verbo dominguero. Pasear: primera conjugación que unía a padre, madre e hijos, todos con zapatos embetunados bajo el solcito fresco del fin de semana; por Sagasta, por Independencia y por la Gran Vía.
Cosas del pasado. Ahora esos hijos que son padres vuelven a utilizar el verbo pasear pero en lunes, con todo lo que lleva implícito. Porque pasear después de poner al fuego una olla expres vacía no es lo mismo que tras engullir una gamba con gabardina del Tubo. Diferencias irreconciliables.
Hoy llueve. Las caras tristes desbordan el Ebro, tanto en la orilla izquierda como en la derecha. En mi Zaragoza las diferencias entre izquierda y derecha se redujeron a simples siglas. Hoy los miles de Echegaray y los miles del Arrabal buscan lo mismo: una silla donde sudar ocho, diez o quince horas, cinco días a la semana, once meses al año. Luchan y pelean por un puñado de números necesarios hasta la extenuación. Después caminan a casa de los abuelos en busca de un puchero en el que mojar el pan. Punto y paro desesperante.
Desde el púlpito me invitaron cambiar Zaragoza, a mí y a todos los míos. La heroica, siempre heroica e inmortal no debía dar la espalda al Ebro. Yo me alegré al escucharlo y los zaragozanos, los de la izquierda y los de la derecha, abrazamos la ribera. La ribera y algo más para que las ocho letras de Zaragoza se escribiesen en mayúsculas. Ejercicio obligatorio en las escuelas públicas, privadas y concertadas; en los trabajos y en nuestras casas.
Yo ahora propongo otro ejercicio obligatorio y selectivo. Cada mañana, antes de recoger las judías de la olla de nuestras viejas debemos dar un empujón al Ayuntamiento; de lunes a domingo y el lunes otra vez, cada uno como pueda, siempre en el sentido de las agujas del reloj. Unos hacia un lado y otros hacia otro es de poco inteligentes. Poco a poco le daremos la vuelta a la casa de todos y sus ojos ojerosos de los lunes, al menos, nos verán pasear por las orillas del Ebro.